El Auga
El agua
Si algo caracteriza a este territorio es la riqueza y variedad de sus aguas, que van desde las zonas termales hasta las charcas o pozas repartidas a lo largo de su geografía.
El paisaje, la práctica de turismo activo y la gastronomía pueden ser características comunes a muchos espacios naturales. Sin embargo, será muy difícil encontrar otro que cuente con un patrimonio termal tan amplio y de tanta calidad como este territorio.
El balneario de Lobios se encuentra en Riocaldo, y aunque el río que lleva ese nombre y da identidad al núcleo de población tiene aguas gélidas, como corresponde a un cauce de montaña, bajo el subsuelo se acumula un acuífero de generoso caudal que emerge como un torrente de ocho litros por segundo, a través de distintas fuentes, a más de 50 grados de temperatura, y una de ellas, a más de 71 grados, convirtiéndose en la más cálida de toda la península ibérica.
Las pozas del río Mao, las pozas de Vilameá, las de Ondas o la Poza da Seima son lugares accesibles caminando y están debidamente señalizados.
Una visita obligada para los amantes del senderismo y el deporte es el ascenso a la Corga da Fecha, que ofrece un paisaje de sierras agrestes combinado con piedra granítica. Se trata de una serie de cascadas en el tramo final del arroyo da Fecha que salvan un desnivel de doscientos metros hasta alcanzar el encajado lecho del río Caldo. En cada salto, las aguas se remansan formando pozas donde adquieren una agradable coloración azulada.
Los embalses de As Conchas y Salas ofrecen la oportunidad de practicar actividades como el kayak, además de rutas de senderismo o ciclismo de montaña en sus alrededores.